Marilú Salvador tiene una amplia experiencia en el mundo educativo. Y el COVID-19 la hizo concretar uno de los grandes sueños de su vida: un centro educativo con un método alternativo y flexible que potencie todas las habilidades de sus estudiantes.
Con una propuesta innovadora, que mezcla la presencialidad y la virtualidad, The Creating Center está aprovechando todas las amenidades que ofrece Buenaventura para entregar educación de calidad con un aval internacional.
“Tengo casi 30 años en esto”. Así comenzó nuestra conversación sobre cómo se gestó uno de sus grandes sueños: una escuela basada en un método de educación distinto al tradicional.
Desde la academia, en el ministerio e incluso desde iniciativas privadas, Marilú siempre ha impulsado iniciativas para la mejora de la calidad educativa con equidad. Y como ‘Fiel defensora de los derechos de TODOS los niños a una educación de calidad’ -su frase descriptiva de su cuenta de twitter- aprovechó ‘la pandemia’ para poner a rodar The Creative Center, un centro educativo que propone una nueva forma de ver la educación a través de un método alternativo flexible.
“Con todas las habilidades y el conocimiento que he ganado en mi vida profesional, siempre tuve el deseo de crear un centro educativo. Soy una persona que cree en una educación un poco diferente a la educación que tenemos hoy”, comentó.
“Siempre he pensado que muchísimas cosas que se hacen dentro del sistema educativo a veces no hacen sentido. La idea estaba ahí, pero nunca se había dado el momento y luego llegó esta pandemia”, añadió la educadora.
Porque si algo evidenció el Covid-19, es que el sistema educativo panameño no estaba preparado para transicionar de forma abrupta a la virtualidad. Y con la migración de las familias hacia el ‘interior’ -lugares o donde la mayoría de las personas tiene sus segundas viviendas como por ejemplo Buenaventura- la crisis se hizo mucho mayor.
“Lo viví con mis hijos, Tengo tres y me estaba dando cuenta lo poco que estaban aprendiendo ellos y sus compañeros. Y mi preocupación por la educación va más allá de mis hijos. Tiene que ver con el mundo, hacia dónde se va dirigiendo y lo que está pasando”, sostuvo.
Con eso en mente Marilú comenzó a aterrizar todas las ideas y conceptos que había aprendido y desarrollado durante toda su carrera, tratando de encontrar un modelo educativo diferente, que fuera capaz de tomar lo mejor de lo tradicional y perfeccionarlos a través de una filosofía que promueva el aprendizaje a través de la creatividad. Así nació The Creating Center.
Luego de socializar con amistades que aportarían puntos de vista y robustecieron el concepto, una conversación terminaría dándole el espacio adecuado para la concreción de la idea.
“Conversaba con Ana María Vallarino -que también es una persona súper conocedora de estos temas- y me dijo ‘¡wow! esto es lo hemos estado buscando para Buenaventura hace tiempo!”, comentó.
No pasó mucho tiempo entre esa conversación y el inicio de operaciones de The Creating Center. En un entorno único, aprovechando todas las facilidades que existen en Buenaventura. Adaptando salones en salas en espacios de educación y conocimiento, alrededor de la naturaleza y las amenidades de un complejo de clase mundial.
PL: ¿Cuál es el concepto educativo detrás de The Creating Center?
MS: Nosotros somos un centro de creatividad y de innovación, con un método flexible que se sustenta en una filosofía que promueve un punto de vista distinto sobre el niño y la educación.
PL: ¿Sobre que pilares se basa esta filosofía?
MS: Son cinco: Individualidad, independencia, integridad, sostenibilidad y comunidad.
La individualidad es importante. Todos los niños son únicos, aprenden y tienen necesidades educativas diferentes y que se manifiestan a diferentes edades. No existe una fórmula única.
Algunos niños descubren una inclinación por las artes, la música, las matemáticas o los deportes a una edad temprana. Otros demoran un poco más. Aquí nos enfocamos a promover el talento de los niños y diseñamos unas rutas de aprendizaje en torno a ellas.
Luego está la independencia. Que creemos es una de las habilidades más importantes para esta época. Y el sistema tradicional no la promueve, por el contrario, genera dependencia de un modelo, de un profesor, de unas herramientas.
Y la mejor forma de aprender es desarrollando la curiosidad. Fomentamos esta habilidad innata que impulsará a los niños a explorar, descubrir, inventar y reinventar.
PL: ¿Cuáles son los otros tres pilares?
MS: La integridad, el amor a la naturaleza y la comunidad. Sobre el primero, nos importa mucho educar de forma integral: mente, cuerpo y espíritu. Que entiendan sus emociones desde pequeños y aprendan a manejarlas. Que se sientan felices con lo que están aprendiendo en todos sus aspectos de la vida.
Luego está el tema del amor por la naturaleza. Entender el tema de la sostenibilidad a nivel global. De cómo cada cosa que nosotros hacemos impacta al medio ambiente y que no podemos romper con el balance que debe de existir en el mundo y en nuestro planeta. Entenderlo y promoverlo educa a jóvenes apasionados por la naturaleza y su cuidado.
Y por último está el tema de la comunidad. Cómo creamos conciencia en nuestros niños sobre el entorno social en el que viven. Que logren entender y vivir los conceptos de dar y servir, en donde se impacta positivamente en la comunidad en la que me muevo primero para ampliar el alcance luego.
PL: ¿Cómo funciona el sistema?
MS: Para los más chiquitos es presencial. Porque se necesita así. Y los mantenemos con unas medidas de bioseguridad muy altas. Literalmente con una persona que va limpiando detrás de ellos. Porque los niños necesitan y la interacción física con otros niños para poder aprender Nosotros somos seres sociales y no podemos no tener esa interacción.
PL: ¿Cómo es el criterio de evaluación del desempeño?
MS: A través de nuestra escuela partner en los Estados Unidos los niños y jóvenes reciben sus calificaciones. Los facilitadores apoyan a los estudiantes a completar las actividades y requisitos del programa en un ambiente individualizado. Gracias a esto nos aseguramos que los estándares educativos sean internacionales y que la calidad del aprendizaje sea alta. Los estudiantes del Creating Center se gradúan con un diploma americano que les permite estar altamente preparados para la educación universitaria.
PL: ¿Y cómo se aplica toda la filosofía detrás de The Creating Center?
MS: Lo que nosotros hacemos es complementar eso con este propósito detrás, que el niño vea las materias académicas desde otra perspectiva. Además el programa incluye proyectos donde tienen que poner en práctica lo que están aprendiendo, esto lleva el aprendizaje a la vida real y, aprovecha todo lo que Buenaventura nos ofrece.
En Buenaventura por ejemplo, tenemos un Centro de Conservación donde nuestros estudiantes están aprendiendo acerca de los animales que se han rescatado, muchos en peligro de extinción.
Conocen su historia, por qué fueron rescatados, de dónde vienen y qué están haciendo aquí. Investigan sobre maneras de solucionar los temas que hacen daño al medioambiente y ponen en peligro la vida de estos animales. Los niños están aprendiendo cosas de la vida real. ¿Cuántos niños pueden hacerlo así?
Otra cosa que tenemos es acceso al centro deportivo en Buenaventura donde los niños están aprendiendo deportes como básquetbol, tenis y natación en esa piscina olímpica que es un espectáculo.
Entonces el lugar se presta mucho. Vamos a la playa, al parque, a un área sensorial diseñada en Buenaventura. Aprovechamos mucho lo que está alrededor, está el río, la playa, la montaña.
Mucho del aprendizaje se da en el exterior del edificio, no dentro de un salón de clases. Los niños pequeños están corriendo, recogiendo plantitas y hojitas para contarlas o viendo los caminitos de hormigas. Entonces ese es el tipo de cosas que nosotros hacemos para poder elevar el aprendizaje y mejor porque estamos aprovechando todo lo que Buenaventura tiene para ofrecer.
PL: ¿Este programa los prepara para, a futuro, poder entrar a la universidad?
MS: Si. Este programa educativo se utiliza a través del mundo y tiene más de 30 años, con una gran cantidad de niños graduados e incluso seleccionados en varias universidades de la Ivy League.
Además dentro del programa existe lo que se llaman AP courses, qué son los cursos de Advanced Placement donde los estudiantes reciben créditos universitarios para entrar a la universidad, con ciertas clases rendidas.
PL: ¿Pueden aplicar estudiantes internacionales a The Creating Center?
MS: Básicamente The Creating Center es una escuela internacional y hoy tenemos familias de diferentes partes del mundo que ya viven aquí en Buenaventura y tiene a sus hijos aquí.
PL: ¿Cuáles son los grandes desafíos hoy para la educación?
MS: Hoy hay muchos. Pero quizás el más grande y el que más me resuena es el de la resistencia al cambio. No existe un único método de enseñanza y nuestra propuesta es una nueva forma de ver la educación a través de un método alternativo flexible.
Marilú quiere expandir este concepto a más lugares como Buenaventura. Espacios educativos para comunidades que potencian la educación y aprendizaje de los niños y los preparan de mejor forma a los desafíos del futuro.
Para mayor información puede visitar https://creatingcenter.org y conocer más sobre su propuesta educativa.